La fuente de Rivedoux

A finales de los años 30, la isla seguía siendo una auténtica isla, sin ningún puente que llevara el agua a las casas. Así que los habitantes de Rivedous necesitaban un medio para abastecerse de agua. Se instaló una pequeña bomba manual a pocos metros de la fuente actual. Servía para distribuir agua a todo el pueblo. Estaba situada en un camino de tierra muy transitado por carros y servía para llenar las cisternas utilizadas para sulfatar las viñas.
Después de la Segunda Guerra Mundial, los refugiados que se habían instalado en Rivedoux regalaron a los habitantes del pueblo un motor eléctrico para automatizar la bomba como agradecimiento por su acogida. Después, hacia 1950, se asfaltó la carretera y el pozo desapareció.

En 2008, la carretera se asfaltó de nuevo y el pozo volvió a la vida. Un año después, se construyó la fuente actual para simbolizar esta parte de la historia del pueblo.