Un lugar dedicado al arte de vivir, donde podrá disfrutar de nuestros helados y pasteles, pero también de tartas saladas y tablas de aperitivos con productos locales.
El templo del helado con entre 250 y 300 sabores, desde los más clásicos hasta los más locos, pero siempre con la máxima autenticidad.
Cada sabor tiene su propia personalidad. En La Martinière, nos esforzamos por respetar al máximo la integridad de los ingredientes. Por eso nuestros helados tienen texturas típicas según el sabor elegido: limón ligeramente brillante, mango delicadamente pastoso... Elegimos los ingredientes de mejor calidad, utilizamos poco azúcar, pocos estabilizadores y poco aire. Nuestros helados captan la quintaesencia de la materia.
Cada sabor tiene su propia personalidad. En La Martinière, nos esforzamos por respetar al máximo la integridad de los ingredientes. Por eso nuestros helados tienen texturas típicas según el sabor elegido: limón ligeramente brillante, mango delicadamente pastoso... Elegimos los ingredientes de mejor calidad, utilizamos poco azúcar, pocos estabilizadores y poco aire. Nuestros helados captan la quintaesencia de la materia.